Entre los 18 meses y los 2 años, es conveniente que los niños olviden los pañales y se habitúen al orinal.
Antes de los dos años los niños no suelen ser capaces de interpretar los estímulos como el de tener la vejiga llena; por ello orina antes de que ésta se llene por completo no dándole tiempo de saber que tiene ganas de hacerlo. Por ello, no es conveniente quitarle el pañal antes de esta edad.
Para conseguir controlar los esfínteres, es necesario que su sistema nervioso alcance cierto grado de madurez. Para saber cuándo es el momento idóneo para retirarle el pañal, hay que fijarse en cosas tipo: si el niño es capaz de subir y bajar una escalera, si tiene capacidad para concentrarse durante un largo rato en un juego, si posee una cierta habilidad manual…Estos hechos muestran que ha alcanzado una buena coordinación psicomotora.